La campaña de la vicepresidenta Kamala Harris busca movilizar a votantes latinos a través de caravanas y reuniones comunitarias, con un enfoque en la importancia del derecho al voto. Al mismo tiempo, simpatizantes de Donald Trump, especialmente en Miami, promueven su retorno bajo el lema “Hagamos a Estados Unidos grande otra vez”.
El voto latino ha sido históricamente demócrata, pero un estudio reciente de la Universidad Internacional de Florida (FIU) revela un cambio hacia los republicanos, especialmente en Florida y otros estados del «Cinturón del Sol» como Nevada, Arizona y Texas. Este giro podría ser decisivo en las elecciones, en especial en estados indecisos donde la participación de la comunidad hispana puede inclinar la balanza.
Aunque temas como el aborto y la migración siguen siendo relevantes, la economía domina las preocupaciones de los votantes. Un estudio de Gallup muestra que más del 50 % de los votantes en EE. UU. consideran que la situación económica ha empeorado. Para muchos latinos, la alta inflación y el aumento en los precios de bienes esenciales alimentan la percepción de que las políticas de Trump podrían mejorar la economía. Mientras tanto, la campaña de Harris trabaja para destacar logros como el plan de rescate y la condonación de deuda estudiantil.
Los sondeos recientes del Centro de Estudios Políticos de Harvard indican una leve ventaja para Trump en los estados clave entre los votantes anticipados, aunque Harris aún lidera por 8 puntos en el recuento general a nivel nacional. En un escenario tan ajustado, el resultado final podría depender de la efectividad de las campañas en movilizar a los latinos en los próximos días.
También te puede interesar: ONU Debatirá el Ataque de Israel contra Irán en Medio de Creciente Tensión en Oriente Medio
Con el resultado aún en el aire, ambas campañas continúan afinando su mensaje. Harris se enfoca en las oportunidades para pequeños negocios y la compra de viviendas, mientras que Trump promete un retorno a la estabilidad económica. Este enfoque en el electorado latino podría ser determinante en una elección que se anticipa reñida y cargada de tensiones.