Putin aprueba doctrina nuclear que autoriza uso de armas nucleares en respuesta a ataques convencionales

El presidente ruso, Vladímir Putin, firma un decreto que amplía la doctrina nuclear

Permitiendo el uso de armas nucleares ante amenazas a la soberanía de Rusia y Bielorrusia

La nueva doctrina nuclear rusa: una respuesta a las amenazas convencionales El presidente de Rusia, Vladímir Putin, aprobó el 19 de noviembre un decreto que modifica la doctrina nuclear del país, permitiendo el uso de armas nucleares en caso de ataques convencionales que amenacen la soberanía y la integridad territorial de Rusia y Bielorrusia. Esta decisión llega después de los recientes informes sobre la autorización de misiles de largo alcance de Estados Unidos para Ucrania, lo que ha aumentado las tensiones en el conflicto.

Condiciones para el uso de armas nucleares

La doctrina establece que Rusia podrá recurrir a un ataque nuclear si se enfrenta a una “amenaza crítica” derivada de un ataque convencional, ya sea dirigido directamente a su territorio o a sus aliados en la Unión Estatal Rusia-Bielorrusia. La nueva estrategia también contempla que cualquier agresión a través de una coalición militar, incluso por parte de países sin armamento nuclear pero respaldados por una potencia nuclear, será considerada como una agresión conjunta, lo que amplía la aplicación de la disuasión nuclear.

Un mensaje directo a Estados Unidos y la OTAN

Los analistas interpretan la doctrina como una clara advertencia hacia Estados Unidos y la OTAN, en caso de que decidan involucrarse directamente en el conflicto en Ucrania. El texto señala que cualquier ataque masivo con aviones de guerra, misiles de crucero, hipersónicos, drones y otros dispositivos no tripulados que violen el espacio aéreo ruso también podría desencadenar el uso de armas nucleares. Por primera vez, se incluye a los drones en la lista de amenazas, reflejando su creciente protagonismo en los conflictos modernos.

Las armas nucleares como instrumento de disuasión

A pesar de la ampliación de las condiciones para el uso de armas nucleares, la doctrina subraya que Rusia considera estas armas como un “instrumento de disuasión” de carácter defensivo. El uso de estas, según el Kremlin, sería considerado una “medida extrema y forzosa”, diseñada para proteger la soberanía rusa ante agresiones externas.

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Contexto de la decisión

Este cambio en la doctrina se produce justo cuando se cumplen 1.000 días de conflicto en Ucrania y en un contexto de creciente tensión con las potencias occidentales. Putin ya había desplegado armas nucleares tácticas en Bielorrusia como parte de su estrategia para contrarrestar la presión internacional y ha advertido previamente que cualquier involucramiento directo de Estados Unidos y la OTAN en el conflicto sería considerado como una declaración de guerra contra Rusia.

La firma de esta doctrina refuerza la postura de Rusia, al tiempo que intensifica la incertidumbre sobre las posibles repercusiones de un conflicto prolongado con la intervención de potencias nucleares.