Jubileo 2025: Apertura de la Puerta Santa en Santa María la Mayor y Reflexión sobre la Esperanza
La solemne apertura de la cuarta Puerta Santa marca un llamado a la esperanza y la comunión con Dios
En el marco del Jubileo Ordinario de 2025
La Basílica de Santa María la Mayor, uno de los principales santuarios marianos del mundo, fue el escenario de la apertura de la cuarta Puerta Santa del Jubileo Ordinario de 2025, el pasado miércoles 1 de enero. Presidida por el Cardenal Rolandas Makrickas, esta ceremonia solemne se celebró en la festividad de Santa María Madre de Dios, destacando el papel de la Virgen como guía de la humanidad hacia la esperanza y la fe en Cristo.
Un acto histórico en Santa María la Mayor
El evento estuvo marcado por el repique de la icónica campana “La Sperduta”, que regresó a la basílica tras 140 años en los Museos Vaticanos. Este símbolo histórico evoca el auxilio de la Virgen a quienes buscan el camino de regreso a Dios.
En su homilía, el Cardenal Makrickas reflexionó sobre el significado de esta apertura en el contexto del Jubileo, recordando que “todos estamos llamados a una esperanza gozosa” y enfatizando la universalidad del llamado de Dios a través de María, quien acompaña a todos sin exclusión.
El tiempo como don divino y desafío contemporáneo
El purpurado destacó el tiempo como una “criatura de Dios” y advirtió sobre los riesgos de las tecnologías modernas, que a menudo convierten el tiempo en un recurso perdido. Ordenadores y teléfonos móviles, diseñados para optimizar el tiempo, pueden volverse sus peores enemigos si no se usan con sabiduría. Makrickas subrayó que “el tiempo vivido en comunión con Dios nunca se siente perdido ni agotador”, ofreciendo a María como modelo de dedicación plena y auténtica.
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María, guía y consuelo en el camino del Jubileo
Desde este santuario, que alberga el venerado ícono de la Salus Populi Romani y la reliquia de la Santa Cuna de Jesús, el cardenal invitó a los peregrinos a profundizar su devoción a la Virgen. Comparó su papel con el de la Estrella de Belén, guiando a todos hacia Cristo, quien es la plenitud de los tiempos.
En palabras del Cardenal Makrickas: “María es el arca segura en medio del diluvio”, una referencia a su papel protector en la fe. El purpurado exhortó a los fieles a vivir este Año Jubilar con una preocupación genuina por los más necesitados, siguiendo el ejemplo de María y poniendo sus vidas en manos de Cristo.
La última Puerta Santa del Jubileo será abierta el próximo 5 de enero en la Basílica de San Pablo Extramuros, conforme a las disposiciones del Papa Francisco en la bula Spes non confundit. Este acto culminará el recorrido simbólico que invita a todos los creyentes a renovar su fe y esperanza en este Año Santo.