Fotografía: DW / Evan Vucci / AP / picture alliance

El presidente Joe Biden recibió el miércoles a su homólogo surcoreano, Yoon Suk Yeol, en una visita de estado en la que anunciarán un escudo nuclear estadounidense reforzado para el aliado vital de Washington frente a una Corea del Norte agresiva.


Una guardia de honor militar y cientos de invitados se congregaron frente a la Casa Blanca, donde Yoon y su esposa, Kim Keon Hee, llegaron para un día de protocolo, ceremonia y discusiones geoestratégicas de gran alcance.

De pie junto a Yoon, Biden elogió lo que llamó el “vínculo inquebrantable” de la “alianza de hierro” de los países, forjada en la Guerra de Corea hace siete décadas.

Hoy, los aliados son potencias económicas y socios para mantener una región de Asia Pacífico “libre y abierta”, dijo Biden, y agregó: “El nuestro es un futuro lleno de oportunidades inimaginables”. 

Más tarde, Biden le dijo a Yoon al comienzo de sus conversaciones en la Oficina Oval que “estamos duplicando nuestra cooperación como aliados incluso cuando (Corea del Norte) aumenta sus desafíos”. 

Yoon respondió diciendo que la alianza entre Estados Unidos y Corea del Sur no es “contractual” sino una “asociación eterna”. 

Antes de la llegada de Yoon, altos funcionarios estadounidenses dijeron a los periodistas que los dos líderes anunciarían medidas para reforzar la disuasión contra Corea del Norte, incluido el primer despliegue de un submarino estadounidense con misiles nucleares en el país en décadas. 

Lo que se conocerá como la Declaración de Washington también creará un grupo consultivo entre Estados Unidos y Corea del Sur, que dará a Seúl más información y aportes sobre política nuclear, aunque Washington conservará el control exclusivo de sus armas, dijeron funcionarios. 

El arreglo, que responde a la tensión cada vez mayor sobre las pruebas de misiles y el arsenal nuclear de la comunista Corea del Norte, hace eco de los movimientos vistos por última vez cuando Washington supervisó la defensa de Europa contra la Unión Soviética. 

“Estados Unidos no ha tomado estos pasos, realmente, desde el apogeo de la Guerra Fría con nuestro puñado de aliados más cercanos en Europa y estamos tratando de asegurarnos de que al emprender estos nuevos procedimientos, estos nuevos pasos, nuestro compromiso con la disuasión extendida es incuestionable”, dijo un alto funcionario.

Los funcionarios, que hablaron bajo condición de anonimato, enfatizaron que no hay planes para colocar armas nucleares estadounidenses en Corea del Sur, a diferencia de la Guerra Fría, cuando se desplegaron armas estratégicas estadounidenses en Europa. Además, Seúl reiterará su compromiso en la declaración de no buscar su propio arsenal nuclear. 

– Submarinos y portaaviones –

“Anunciaremos que tenemos la intención de tomar medidas para hacer que nuestra disuasión sea más visible a través del despliegue regular de activos estratégicos, incluida una visita de un submarino balístico nuclear de EE. UU. a Corea del Sur, lo que no ha sucedido desde principios de la década de 1980 ”, dijo un funcionario. 

Además de los submarinos, habrá una “cadencia regular” de otras plataformas importantes, “incluidos bombarderos o portaaviones”, dijo el funcionario, quien enfatizó, sin embargo, que “no habrá bases para esos activos y ciertamente no para armas nucleares”. 

Un funcionario dijo que se están tomando medidas con anticipación para calmar las posibles tensiones con Beijing por la postura militar más dura. 

“Estamos informando a los chinos con anticipación y exponiendo muy claramente nuestra razón de por qué estamos tomando estos pasos”, dijo el funcionario, y agregó que la administración Biden está “decepcionada de que China no haya estado preparada para usar su influencia” en Corea del Norte. 

Yoon es solo el segundo líder extranjero invitado a una visita de estado de Biden. Un día repleto de reuniones y ceremonias de alto nivel concluirá con una lujosa cena de estado en el histórico East Room. 

Yoon se dirigirá a una sesión conjunta del Congreso el jueves y almorzará con la vicepresidenta estadounidense Kamala Harris y el secretario de Estado Antony Blinken. 

El viernes visitará el MIT y la Universidad de Harvard en Boston, antes de regresar a casa el sábado. 

El martes, Yoon y Biden visitaron el Monumento a la Guerra de Corea, que presenta estatuas de acero de tamaño natural de soldados estadounidenses que marcharon durante la guerra de 1950-53 contra el norte comunista. 

Yoon también depositó una ofrenda floral en la Tumba del Soldado Desconocido en el Cementerio Nacional de Arlington y acompañó a Harris en un recorrido por las instalaciones de la NASA cerca de Washington.

Cortesía: AFP

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