A pesar de su potencial, están sub explotadas debido a problemas de gestión y sanciones internacionales
Contexto y Situación Actual
Venezuela posee una de las mayores reservas de gas natural del mundo, con casi 200 billones de pies cúbicos (tcf) de reservas probadas. Sin embargo, la producción ha caído drásticamente, alcanzando solo unos 4.000 millones de pies cúbicos por día (mmpcd) en 2024, comparado con casi 8.000 mmpcd en 2016. La falta de inversión, mala gestión por parte de la estatal PDVSA y las sanciones internacionales han contribuido a esta caída, afectando el suministro interno y la capacidad de exportación.
Impacto en la Población
Griselda Ascanio, una residente de Maracay, se ve obligada a usar un fogón de leña debido a las interrupciones en el suministro de gas. Esto refleja una realidad cotidiana para muchos venezolanos, donde el gas doméstico, distribuido en cilindros por consejos comunales controlados por el gobierno, es escaso y caro de producir.
Desafíos para el Futuro Gobierno
El próximo gobierno enfrentará el reto de revitalizar la industria del gas. La coalición opositora, representada por Edmundo González, propone una mayor participación del sector privado y la reestructuración de la deuda externa de hasta 150.000 millones de dólares. Esto contrasta con el enfoque del gobierno actual, que ha intentado atraer inversiones extranjeras sin mucho éxito debido a deudas impagas y un ambiente de inversión desfavorable.
Perspectivas de Desarrollo
A pesar de los desafíos, existen oportunidades significativas en el sector gasífero de Venezuela. El proyecto Mariscal Sucre, con 12 billones de pies cúbicos de reservas, y otros campos offshore podrían atraer inversiones si se eliminan las barreras burocráticas y se estabiliza el entorno financiero. Además, la reducción de la quema de gas y el aprovechamiento de recursos no explotados podrían mejorar la situación económica y ambiental del país.