Fotografía: DW / Mahmoud Hassano / REUTERS
Los recursos serán vitales para ayudar por tres meses a más de cinco millones de ciudadanos afectados por el terremoto en Siria quienes necesitan refugio, alimentación, atención oportuna y medicamentos con urgencia, ya que enfrentan temperaturas bajo cero.
Guterres en su discurso puntualizó que el sufrimiento humano causado por el desastre natural no debe verse agravado por las barreras de acceso, financiación y suministros.
A pesar de la elevada cifra de más de 40 mil fallecimientos en ambas naciones, los cuerpos de emergencia encontraron con vida a otras cinco personas, atrapadas entre los escombros y a una anciana de 70 años tras más de 212 horas de los terremotos.
Desde el Vaticano también se enviaron ayudas humanitarias para atender las víctimas de estos sismos a través de la limosnería apostólica, además de las oraciones expresadas durante el ángelus del pasado domingo.
Desde la UNICEF las adopciones express para los niños que han quedado huérfanos por estos terremotos no han sido bien recibidas, puesto a que estas no deben tener lugar en el contexto de crisis humanitaria y como primera instancia se debe garantizar la protección respetando sus derechos y la convención de La Haya.