Aumentan los ataques con bombas y artillería en la ciudad de Rafah al sur de Gaza. Las fuerzas de defensa de Israel ya planean la ofensiva terrestre en la región donde se resguardan millones de refugiados.

En la ciudad fronteriza de Rafah, al sur de Gaza, tanques y artillería disparan contra el territorio palestino desde la localidad de Kerem Shalom en Israel, aumentado así la presión militar en la única ciudad que no ha sido asediada con tropas y en la que por lo menos 1.5 millones de gazatíes se encuentran refugiados, mientras aumenta el peligro por los ataques y la alta posibilidad de tener que desplazarse nuevamente en el enclave palestino sin alguna opción segura.

Si bien, autoridades internacionales buscan que se llegue a un alto al fuego, el primer ministro israelí Benjamín Netanyahu continúa con su posición de destruir al grupo Hamás, considerado como terrorista por la Unión Europea y Estados Unidos, afirmando que la invasión terrestre con tropas y blindados en Rafah es inminente.

Igualmente, el ministerio de salud de Hamás anunció el miércoles que al menos 28.576 personas han
muerto en la Franja de Gaza, en su mayoría mujeres, adolescentes y niños, desde el inicio de
la guerra entre Israel y el movimiento islamista palestino. El balance incluye 103 muertos en las últimas 24 horas tras las nuevas rondas de artillería.