Fotografía: DW/Majdi Mohammed/AP/picture alliance

Este miércoles, el gobierno israelí dio por terminada su operación en la Cisjordania ocupada, las autoridades en Tel Aviv confirmaron que unos 12 ciudadanos palestinos fallecieron durante las hostilidades.


Este nuevo operativo realizado por la fuerza pública israelita también ocasionó nuevos enfrentamientos en la franja de gaza y finalizó con la muerte de un militar de la nación judía.

Esta es una operación que no se daba desde 1967 y la cual fue efectuada en Yenín, una provincia de Cisjordania que aproximadamente cuenta con la ocupación de 18 mil personas. Según el Ministerio de Sanidad de palestina, más de 100 palestinos heridos se registraron tras las acciones militares de Israel.

A pesar del hecho histórico, los ataques israelíes sobre dicho territorio son recurrentes y los nuevos daños se registraron en casas y edificios de la región, quedando afectada gran parte de la infraestructura con agrietamientos y agujeros en techos y paredes.

De otro lado, el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu aseguró que dicho territorio es un nido de terroristas, razón suficiente para hacer todo lo posible por erradicarlo, un acto desafiante contra las leyes internacionales. 

Durante este miércoles se registraron más bombardeos en la franja de gaza como respuesta a la operación realizada por Israel, mientras que el gobierno de Tel Aviv celebró la captura de 30 personas sindicadas de terrorismo en la zona.

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