Israel advierte de una "nueva fase" de la guerra tras explosiones en Líbano: La tensión con Hezbolá crece
El ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, aseguró que el conflicto con Gaza entra en una nueva etapa, centrada ahora en la frontera con Líbano
Tras las explosiones de dispositivos de Hezbolá que dejaron miles de heridos y decenas de muertos
Una escalada en el conflicto
El conflicto en Oriente Medio ha entrado en una fase de alta tensión, con Israel apuntando ahora sus esfuerzos hacia el norte, en la frontera con Líbano, donde el grupo chií libanés Hezbolá ha estado en el centro de un violento intercambio de fuego desde el 8 de octubre. Tras las explosiones de dispositivos de comunicación utilizados por Hezbolá en el sur de Beirut y otras áreas del Líbano, que dejaron miles de heridos y más de 20 muertos, el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, anunció que Israel se dirige hacia una “nueva fase” de la guerra.
Durante una visita a la base de la fuerza aérea en Ramat David, Gallant explicó que el enfoque del conflicto ahora se mueve hacia el norte, donde las tensiones con Hezbolá han obligado a la evacuación de más de 60.000 residentes de las comunidades israelíes cercanas a la frontera. “Estamos a las puertas de una nueva fase en esta guerra, y necesitamos adaptarnos”, señaló el ministro en declaraciones recogidas por medios israelíes.
Preparativos en la frontera norte
Mientras tanto, el jefe del Estado Mayor del Ejército israelí, Herzi Halevi, se reunió con los responsables del Comando Norte para aprobar planes de ataque y defensa en la zona, con el objetivo de contener cualquier escalada por parte de Hezbolá. Según Halevi, Israel cuenta con “capacidades que aún no ha activado”, y advirtió que las próximas fases de la guerra podrían tener un precio alto para Hezbolá.
Las fuerzas israelíes han comenzado a trasladar tropas desde la Franja de Gaza hacia la frontera norte, en preparación para una posible intensificación del conflicto. La división del Ejército que ha estado combatiendo en Gaza durante meses será reasignada al norte, como parte de este cambio estratégico en la guerra.
El impacto en la población La evacuación de los 60.000 residentes del norte de Israel ha sido una medida preventiva en respuesta al aumento de las hostilidades con Hezbolá. Las explosiones recientes de dispositivos de comunicación en el sur de Beirut, además de afectar a Hezbolá, también causaron bajas entre civiles libaneses, lo que ha incrementado la tensión en la región.
Hezbolá, por su parte, ha advertido que tomará represalias si Israel continúa con los ataques, aunque Israel no ha reconocido oficialmente su implicación en las explosiones de estos dispositivos en Líbano, siguiendo un patrón habitual en situaciones de este tipo.
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El retorno de los desplazados
El gobierno israelí, mientras tanto, ha añadido a sus objetivos de guerra el retorno seguro de los desplazados del norte a sus hogares, una vez que las condiciones de seguridad lo permitan. Sin embargo, con la guerra en Gaza aún activa y las tensiones en la frontera con Líbano en aumento, el retorno parece estar lejos de ser inmediato.
La situación en Oriente Medio sigue siendo extremadamente volátil, con Israel preparándose para nuevas fases de un conflicto que ya ha dejado una estela de destrucción y desplazamiento en ambos lados de la frontera.