Bogotá Aprovecha Asamblea General de la ONU para Impulsar Regularización de Migrantes Venezolanos

Con más de un millón de migrantes venezolanos en Bogotá, las autoridades locales destacan la importancia de su regularización durante la Asamblea General de la ONU

Para integrarlos al mercado laboral formal y contribuir al crecimiento económico

Impacto Económico de la Migración Venezolana en Bogotá: Un Motor para el Desarrollo

Durante la Asamblea General de la ONU, Bogotá ha puesto sobre la mesa la necesidad urgente de regularizar a más de un millón de migrantes venezolanos que residen en la ciudad. Según un informe de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), la migración venezolana ha tenido un impacto económico positivo en Colombia, con una contribución estimada de 529,1 millones de dólares. Este dato refleja el potencial de la diáspora venezolana para fortalecer las economías de los países receptores, incluyendo a Bogotá.

“El alcalde Carlos Fernando Galán ha subrayado que la integración de los migrantes al mercado laboral formal es esencial para aprovechar ese impacto económico, especialmente en una ciudad que enfrenta desafíos de envejecimiento poblacional”, comentó Diego Beltrán, enviado especial de la OIM.

Alcalde Carlos Fernando Galán: “La Regularización es Clave para la Integración”

En un evento paralelo a la Asamblea, el alcalde Galán participó en el Consejo de Alcaldes sobre Migración (MMC) en Nueva York, donde afirmó que Bogotá ha sido históricamente una ciudad migrante, con un ADN construido a partir de migraciones internas debido a situaciones económicas y de violencia. Este trasfondo ha permitido avances en la integración de la nueva población migrante, aunque persisten retos complejos, particularmente con aquellos migrantes que se encuentran en situación irregular.

“La regularización es la única vía para que los migrantes venezolanos se conecten económicamente con Bogotá”, dijo Galán, enfatizando que la integración plena de estos migrantes depende de la obtención de permisos de trabajo que les permitan contribuir legalmente a la economía local.

Actualmente, más del 80 % de los migrantes venezolanos en Bogotá están ocupados en la economía informal, una cifra que contrasta con el 30 % de la población local en esta misma situación. Esto limita el potencial económico de la ciudad y refuerza la necesidad de regularización.

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Desafíos y Oportunidades en la Integración de Migrantes en una Ciudad Envejecida

A medida que Bogotá envejece, el flujo de migrantes venezolanos jóvenes representa una oportunidad para revitalizar el mercado laboral. “La ciudad necesita mano de obra nueva para suplir la falta de personal”, comentó Galán, quien está convencido de que la migración bien gestionada puede generar oportunidades económicas para Bogotá y otras ciudades en situaciones similares.

Sin embargo, el alcalde también mostró su preocupación por el creciente estigma y xenofobia hacia los migrantes venezolanos, una problemática que afecta su integración y crea barreras adicionales. “No debemos permitir que algunos casos aislados de delincuencia generen una percepción negativa de toda la población migrante”, aclaró Galán, destacando que los migrantes no están más vinculados a la criminalidad que los ciudadanos locales.

El alcalde concluyó sus declaraciones haciendo un llamado a la comunidad internacional y al gobierno nacional para que refuercen los esfuerzos hacia la regularización, pues considera que es la única forma de asegurar que Bogotá aproveche de manera efectiva el aporte de esta población migrante.