Las torrenciales lluvias que han golpeado a países de Centroamérica, como El Salvador, Guatemala y Honduras, han dejado a su paso destrucción y más de 20 personas fallecidas
Al menos 21 muertos, ríos desbordados y múltiples daños en carreteras son las consecuencias de una semana de intensas precipitaciones en la región.
El Salvador es el país más afectado tanto en infraestructura como en el número de víctimas, con 13 personas fallecidas en los últimos días debido a varios deslizamientos en el sur de San Salvador. La situación es crítica, con comunidades enteras aisladas y vías de comunicación interrumpidas.
En la zona fronteriza entre Guatemala y México, nuevos desprendimientos de tierra arrasaron con un vehículo, aumentando el número de muertos a 7 en esta región. Las autoridades locales trabajan arduamente para rescatar y asistir a las personas atrapadas o afectadas por estos deslizamientos.
Se pronostica que las lluvias torrenciales continúen durante el fin de semana, complicadas por la influencia de la tormenta Alberto que afecta a México y al norte de la región. Este fenómeno meteorológico podría agravar aún más la situación, aumentando el riesgo de nuevos desbordamientos de ríos y deslizamientos de tierra.
Las autoridades de los países afectados han comenzado a evaluar los daños en la infraestructura y en los cultivos. En El Salvador, las carreteras dañadas y los deslizamientos han dificultado el acceso a muchas áreas, complicando los esfuerzos de rescate y ayuda. En Guatemala y Honduras, los daños a las carreteras y puentes han interrumpido el tráfico y aislado varias comunidades.
Los equipos de emergencia y las organizaciones humanitarias están trabajando sin descanso para atender a las víctimas y llevar ayuda a las zonas más afectadas. Las autoridades hacen un llamado a la población a mantenerse alerta y seguir las indicaciones de seguridad para evitar más pérdidas humanas.
La situación en Centroamérica es alarmante, y se espera que la comunidad internacional ofrezca apoyo para enfrentar esta emergencia climática que ha cobrado tantas vidas y dejado un rastro de destrucción en su camino.