En su intervención en la cumbre para un nuevo pacto financiero, el presidente colombiano Gustavo Petro propuso la aplicación de un plan Marshall para enfrentar la crisis climática favoreciendo al medio ambiente.
El mandatario colombiano argumentó que debe ser un compromiso global que implique una tasa a las transacciones financieras, pero también con emisiones especiales de deuda destinadas a inversiones climáticas.
Petro también planteó sustituir combustibles fósiles “no complementarlos” y que “el nivel de inversiones que hay que hacer para superar la crisis climática llevaría a cambiar la matriz energética en el mundo.
Para este fin requirió el apoyo de la unión Europea, Insistiendo que a las industrias que más contaminan podrían imponérsele más impuestos.