Gran tristeza en el cine internacional tras la muerte de una de sus grandes referentes: Raquel Welch.
Originaria de Chicago, Jo Raquel Tejada, mejor conocida como Raquel Welch, fue una destacada actriz del séptimo arte durante los años 60 y 70 con una belleza sin igual que cautivo a todos los amantes de la pantalla grande, lo que le permitiría convertirse en un verdadero ícono global.
Su apellido tejada le fue heredado de su padre de origen boliviano y luego lo cambió por el de su primer esposo James Wesley Welch con quién se casó en 1959 y tuvo dos hijos. A pesar de esto, nunca negó sus raíces latinas aún con la petición del señor Armando Carlos Tejada de que las ignorara para encajar en los Estados Unidos.
Welch ganó varios certámenes de belleza, ya que desde su adolescencia siempre fue admirada por su físico, sin embargo, ella siempre aspiró a ser actriz, un esfuerzo que le permitió participar en cintas de Elvis Presley con un pequeño papel en Roustabout de 1964 y Fantastic Voyage de 1966, así como también con Frank Sinatra en Hannie Caulder, Fathom y Lady in Cement, entre muchos otros.
La cinta Hace un millón de años de 1966,cuyo póster promocional pasaría a la historia del cine mundial, la lanzó al estrellato compartiendo set con John Richardson y desde allí le fue impuesto su apodo de “el cuerpo”, llegando a compararla con Marilyn Monroe. Otra de sus cintas icónicas fue Los tres mosqueteros de 1975, dónde le fue otorgado un globo de oro a mejor actriz de comedia.
Además de construir una carrera en el mundo de la actuación, Raquel también fue cantante y llegó a compartir escenario con artistas de la talla de Cher, tanto que fue famosa por dar un concierto a las tropas norteamericanas durante la guerra de Vietnam en 1967.
A pesar de sus polémicas y otros tres matrimonios, más de 70 proyectos audiovisuales, entre ellos una de sus últimas apariciones en Cómo ser un latin lover de Eugenio Derbéz y una estrella en el paseo de la fama, la certifican como una de las actrices más importantes de Hollywood la cual deja un legado para la eternidad, paz en su tumba.