La queratosis pilaris, también conocida como ‘piel de gallina’, es una afección autoinmune de la piel que puede provocar unas protuberancias que a la vista o el tacto pueden resultar molestas.

Esta se genera debido a demasiada cantidad de una proteína llamada queratina en la piel. La queratina obstruye la abertura de los folículos pilosos, lo que provoca manchas ásperas y con protuberancias en la piel.

La dermatóloga Sara Moncada estuvo en Salud para Todo y asegura que esta afección se intensifica en climas fríos y húmedos.

Por eso, recomienda cremas con componentes como ceramidas, ácidos salicílicos e hidratantes para tratarla. También indica que quienes la padecen deben evitar los baños prolongados con agua caliente y frotarse muy fuerte con la toalla.

Asimismo, está indicado el uso de protector solar, mínimo 2 ó 3 veces al día para evitar la resequedad en la piel, envejecimiento prematuro y manchas.

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