Por primera vez en la historia, el break dance ha sido incluido en la lista oficial de deportes de los Juegos Olímpicos
Esta modalidad de baile, que nació en los barrios del Bronx en Nueva York y estuvo asociada a la violencia y las pandillas, celebra ahora su evolución y reconocimiento como deporte. Juan Carlos, un bailarín originario de Quito, Ecuador, ha viajado hasta Miami para participar en un concurso de break dance. Aunque inicialmente lo practicaba como pasatiempo, su pasión por este baile lo ha llevado a profesionalizarse.
Una Nueva Oportunidad para el Break Dance
El break dance, también conocido como b-boying o breaking, surgió en la década de 1970 y es una de las cuatro disciplinas fundamentales de la cultura hip-hop. Este estilo dinámico y enérgico se originó como una forma de expresión entre los jóvenes afroamericanos y latinos en un contexto de dificultades económicas y sociales. Omar ‘RoxRite’ Delgado, uno de los bailarines más reconocidos de esta modalidad, destaca la evolución del break dance desde sus inicios hasta su inclusión en eventos internacionales como los Juegos Olímpicos.
De la Marginalidad al Reconocimiento Mundial
A pesar de su origen en los suburbios y su relación con la violencia entre pandillas, el break dance ha superado su pasado oscuro y ahora vive una nueva época de reconocimiento. Para muchos de sus practicantes, esta disciplina de baile ha sido una forma de salir de los problemas de la calle y encontrar nuevas oportunidades. La inclusión del break dance en los Juegos Olímpicos de París 2024 es un reflejo de su evolución y del impacto positivo que ha tenido en las comunidades.
Juan Carlos, como muchos otros bailarines, ve en esta oportunidad una forma de demostrar que el break dance no solo es una expresión artística, sino también un deporte que requiere dedicación y esfuerzo. La puntuación en los Juegos Olímpicos se basará en cinco factores: musicalidad, vocabulario, originalidad, técnica y ejecución, lo que resalta las características esenciales de este baile.